Si tu maquillaje de madrina te preocupa, aquí te ayudaremos a encontrar el que mejor se adapte a tu estilo y personalidad.
Tips para un Maquillaje de madrina que destaque:
Como cualquier tipo de maquillaje debe ir encaminado a potenciar tus rasgos más favorecedores sin que pierdas naturalidad y frescura, en pocas palabras: que estés impresionante, pero sin dejar de ser tu misma.
La elección de la base del maquillaje
Un punto muy importante a tener en cuenta es tu tipo de piel, sobre todo, en lo que respecta a la elección del fondo de maquillaje. Recomendamos una base específica para pieles maduras ya que cumple los requisitos que deseamos: Al tiempo que tiene un gran poder cubriente, nos proporciona un acabado natural.
Debe ser un producto altamente hidratante, con acabado luminoso y de textura fluida. Siendo también prioritario su acabado mate y sin brillos por el tema de la fotografía y su duración ya que este debe estar en perfectas condiciones durante todo el evento.
Por esta razón, deberemos usar productos de belleza que nos ofrezcan la confianza necesaria y nos aseguren que lucirás una imagen impecable en todo momento.
Antes de proceder al maquillaje de ojos y labios, volveremos a estudiar tu visagismo, es decir, la forma de tu rostro y cada uno de los elementos que lo componen. Así estableceremos el tipo de maquillaje que favorecerá más tus rasgos.
Una vez completado este paso, nos concentraremos en decidir qué centrará la atención del estilismo: los ojos o los labios.
Potenciar la mirada
Si optamos por potenciar la mirada, lo más adecuado a la hora de la elección del color sería crear una armonía con el estilismo, es decir, con el tono del vestido. Si no, siempre podemos decantarnos por trabajar con colores neutros (toda la escala de terracotas, tonos nude y grises), una elección segura que nos permite múltiples combinaciones.
Pestañas: con el objetivo de reforzar aún más la mirada, elegiremos una máscara que aporte longitud y volumen a las pestañas. Si lo prefieres, puedes completar el estilismo con unas pestañas postizas que ayudarán a aportar ese toque de glamour y sofisticación que todas queremos. Podemos aplicarlas enteras o por grupos en la parte externa del ojo para conseguir un acabado más natural.
Cejas: Son de vital importancia ya que representan el 50% de la expresión del ojo. Lucir unas cejas sin peinar, mal depiladas o con una forma incorrecta restará fuerza a tu expresión. Por ello, con un lápiz corrector podremos definir la forma que tu desees y que potencie tus facciones. Un buen truco para aportar mayor amplitud al párpado es darle un poco de altura a las cejas, el marco de nuestra mirada.
Mejillas: En general, no damos la importancia necesaria a nuestros pómulos y los dejamos en un segundo plano. Si le sacamos el máximo provecho a nuestras mejillas veremos que conseguiremos un efecto más juvenil aplicando un colorete rosado o melocotón.
Labios
Son junto a los ojos uno de los rasgos más atractivos del rostro.
Para asegurarnos su resultado y duración, perfilaremos la boca y la maquillaremos retirando después el exceso con un kleenex para después volver a perfilar y maquillar. Un toque de gloss le dará volumen y un toque muy sensual.
Es conveniente que llevemos alguna barra igual o de la misma tonalidad para retocarnos ya que es uno de los elementos más frágiles del maquillaje.
La elección del vestido
Este también determina el maquillaje y su estilo ya que todo debe ir en armonía. Aquí te dejamos algunas pequeñas claves para elegirlo.
Hay que tener en cuenta los rasgos de tu físico, tu altura, tu complexión y tu talla, para elegir un traje adecuado que potencie y resalte de una forma elegante tus rasgos más favorecedores. Teniendo también en cuenta, que el protocolo de etiqueta establece una serie de normas que ejercen como pautas a la hora de definir el estilismo de la madrina.
La formalidad y el horario del enlace serán las dos premisas que nos marcarán el vestuario por el que decantarnos. En normas generales, si la boda se celebra por la mañana, se recomienda un vestido de cóctel o un traje chaqueta a la altura de las rodillas, con la opción de completar el estilismo con una pamela o tocado. Si tiene lugar por la noche, la madrina podrá ir de largo y con guantes.
En lo referente al color del vestido, la madrina podrá elegir entre los que más le favorezcan, exceptuando el blanco para evitar así restarle protagonismo a la novia.
Recomendamos utilizar un calzado con tacón medio o alto, nunca zapatos planos. El bolso, mejor que sea tipo cartera. Las joyas deben ser discretas para evitar restar protagonismo al resto del estilismo.
Todos estos aspectos son importantes para que en el día de la boda luzcas espectacular. ¡La ocasión se lo merece!